miércoles, 24 de noviembre de 2010

SONETOS DE AMOR (W. Shakespeare, 3)

¿Ves?: Como una hacendosa ama de casa trota
tras una de sus plumipintas que se escapa,
posa a su crio en tierra, y toda se alborota
por ver si a la atrevida fugitiva atrapa,

mientras su rorro abandonado se querella
y llora en pos de aquélla cuyo afán se agacha
a perseguir lo que revolotea ante ella,
sin cuidarse del niño y su afligida facha,

así tu corres tras lo que vuela ante tí,
mientras que yo, tu crío, grito en pos mi pena.
Pero si atrapas tu esperanza, torna a mí
y haz el papel de madre: bésame, sé buena.

Así yo rezo por que lo que quieras halles,
con tal que vuelvas y mis lagrimas acalles.

lunes, 22 de noviembre de 2010

SONETOS DE AMOR (W. SHAKESPEARE, 2)

Nuestro pequeño homenje a uno de los mas grandes dramaturgos de todos los tiempo,
con motivo del estreno de Romeo y Julieta, la mas bella historia de amor jamas escrita,

"Ten todos mis amores, amor mio, ten:
y bien ¿que tienes más que antes no tuvieras?
Ningún amor, amor, que sea amor de veras:
todo el mio, sin eso, tuyo era también.

Pues si por amor mío mi amor me arrebatas,
no puedo reprocharte en cuanto mi amor usas;
más caiga en ti reproche si tú te abaratas
gozando por capricho lo que tú rehusas.

Te perdono, gentil ladrón, tu bandidaje
(aunque en él tú te robas toda mi penuria),
y eso que -amor lo sabe- duele más ultraje
de amor que no de odio conocida injuria.

Hermosura lasciva,
en quien cualquier delito son donaires,
mátame ya a desaires:
no he de ser tu enemigo mientras viva."

domingo, 21 de noviembre de 2010

SONETOS DE AMOR ( W. SHAKESPEARE)


Aprovechando que el dia 10 de Diciembre estrenamos Romeo y Julieta
en una versión de perros y gatos, dedicamos estos días cercanos al estreno
a Shakespeare y sus Sonetos de Amor:

"Dejó su antorcha al pie y se echó a dormir Cupido;
una doncella de Diana, atenta al tanto,
cogió el fuego de amor y lo apagó a seguido
en una fría fuente de aquel valle santo,

que del fuego de amor tomó una fuerza ardiente,
perpetuamente viva que por siempre dura,
y unos baños fundó, que aún hoy cuenta la gente
contra extraños achaques soberana cura.

Vuelta a encender la antorcha de amor en el ojo
de mi dama, el mancebo la ensaya en mi pecho;
yo caigo enfermo; a baños por salud me acojo,
y alli me allego, triste huésped y maltrecho,

Mas no hallé cura: el baño
para sanar mi daño
está allí donde Amor halló su nueva llama,
los ojos de mi dama."